Cada cuanto se riegan las plantas

El riego es el suministro de agua a las plantas a fin de que contengan su hidratación y logren efectuar apropiadamente sus procesos vitales.

Humedad

La humedad de las condiciones de desarrollo va a tener un enorme encontronazo en la tasa de evaporación del agua del suelo y la tasa de transpiración de las hojas.

Nuestras viviendas acostumbran a tener escenarios de humedad mucho más bajos en invierno, en el momento en que las ventanas están cerradas y la calefacción encendida. Tenga esto presente en el momento en que piense si su planta precisa o no ser regada.

Meteorología y exposición

Las plantas ubicadas a pleno sol van a perder mucho más humedad por transpiración y evaporación que las ubicadas a la sombra. Las especies con hojas mucho más enormes mostrarán aún mucho más el fenómeno. El viento es asimismo otro hándicap que reseca las plantas.

El cambio de estaciones es por consiguiente un punto a tener en consideración: la radiación del sol en verano no es exactamente la misma que la recibida en invierno. Además de esto, muchas especies entran en sopor o parada vegetativa con el frío hasta la primavera; la necesidad de agua va a ser prácticamente inexistente.

Consejos sobre el riego en las distintas estaciones del año

–Primavera. En el final del invierno, es conveniente regresar a regar delicadamente las plantas, pero de forma medida para no encharcar.

Además de esto, la primavera es una temporada donde indudablemente vas a deber acrecentar el ritmo de riego, que comunmente va a ser un par de veces a la semana. Es conveniente preguntar las pretensiones de cada ejemplar en su ficha de planta.

¿Cuánta agua precisan las plantas en verano?

Es esencial que llegue bastante agua a las raíces, pero sin pasarse. Una medida pequeña de agua solo cubrirá las primeras pulgadas del suelo y, en ocasiones, no eso, en especial si hay un área acolchada que cubre el suelo. Las plantas de cultivo particularmente precisan que el suelo se sostenga uniformemente húmedo.

Dosificar el agua por partes y no verter toda el agua en un solo sitio. Ten en cuenta que el riego ha de ser lo mucho más traje viable y sin desperdicios. Las plantas precisan tiempo para absorber agua, con lo que es preferible no forzar el desarrollo. Si inundas la planta, lo único que lograrás es eludir que el aire preciso llegue a las raíces. Las células vegetales se ahogan si no tienen oxígeno.